Jack Daniel
Productor de ganado lechero
«Nuestro enfoque es desarrollar un ensilaje de la mejor calidad posible como base de la ración. Además, queremos asegurarnos de que obtenemos la mayor cantidad posible de alimento a partir de la materia prima que ingresa al silo de trinchera. MAGNIVA mantiene el silo bien fresco para garantizar que llegue más energía a las vacas.»
Nombre: Familia Daniel, Lower Rillaton Farm
Lugar: Callington en Cornwall, Reino Unido
Tamaño: 160 vacas lecheras
Inoculante: MAGNIVA Platinum
Los inoculantes ayudan a aumentar la eficiencia del forraje
Cuando el sistema está preparado para convertir el alimento producido internamente en leche, la eficiencia del forraje es un objetivo fundamental del negocio. Para la familia Daniel de Lower Rillaton Farm, cerca de Callington, en Cornwall, garantizar la fermentación eficaz y la buena estabilidad es la base para la producción de ensilaje. Jack Daniel maneja una granja de 141 hectáreas junto con su padre, Chris, y sus hijos Matthew y Alex. La granja tiene 160 vacas en parto todo el año que en promedio producen 8,000 litros con 4.68% de grasa y 3.69% de proteína, y lo que cultivan se destina a alimentar el ganado de la granja. Las vacas se estabulan por la noche durante todo el año y pastorean en el día durante el verano. Además de 93 hectáreas de una mezcla entre pastura permanente y pasto resembrado, cuentan con 12 hectáreas de maíz, 12 de trigo y 24 de cebada, que usan para alimentar junto a un concentrado de 25% de proteína doblemente mineralizada. Las dietas las desarrollan junto con Matt Dymond, de Harpers Feeds y actualmente las vacas tienen una dieta de 25 kg de ensilaje de pasto, 10 kg de ensilado de maíz, 2.5 kg de trigo tratado, 2 kg de una mezcla de soja y nabo, paja, minerales y 5 kg de remolacha forrajera comprada. Esta ración total mezclada proporciona M+16 litros con una mezcla de cebada/proteína para que rinda para toda la sala.El desperdicio hace que los costos aumenten
“Nuestro objetivo es desarrollar un ensilado de la mejor calidad posible como base de la ración”, explica Jack. “Además, queremos asegurarnos de que obtenemos la mayor cantidad posible de alimento a partir de la materia prima que ingresa al silo de trinchera. El desperdicio no es más que una pérdida para el negocio, que aumenta los costos”. A mediados de mayo se tomaron alrededor de 56 hectáreas de primer corte, ya que prefieren un poco más la fibra de ése primer corte El segundo corte de 44.5 hectáreas se hizo a finales de junio y el tercer y cuarto cortes se enfardaron. La familia cortó y rastrilló el pasto, antes de que un contratista lo picara y ensilara. Además de compactar con el rastrillo raso, Chris Daniel rueda el silo de trinchera ya que valora mucho una buena compactación. El primer corte resultó con 27% de MS y 11.8 MJ EM/kg de MS, mientras que el segundo corte tuvo 32% de MS y 11.1 MJ EM/kg de MS. “Al alimentar con pasto durante todo el año buscamos una fermentación rápida y un producto estable, ya que en el verano tardamos una semana en extraer el frente y los silos de trinchera están al exterior, expuestos a los elementos naturales”. Este año cambiarán a la nueva gama de inoculantes MAGNIVA para pasto. . Durante muchos años el maíz ha sido una parte esencial del sistema y a mediados de abril se perforó bajo cobertura plástica. A principios de octubre se cosechaba y trataba con el nuevo inoculante MAGNIVA Platinum.Menos calentamiento
MAGNIVA Platinum contiene una combinación única de bacterias L. buchneri y L. hilgardii que produce rápidamente una serie de compuestos antifúngicos que reducen de manera importante las levaduras y hongos que ocasionan el calentamiento y mejoran de inmediato la estabilidad aeróbica, lo que significa que se pueden abrir antes los silos de trinchera de forma segura. También mejoran la estabilidad aeróbica a largo plazo y protegen el ensilaje mientras el silo de trinchera está abierto. Al reducir de manera importante la población tanto de levaduras como de hongos, los compuestos antifúngicos producidos por los inoculantes MAGNIVA reducen la principal causa del calentamiento del silo de trinchera y la pérdida de energía, así como la de una menor palatabilidad del ensilaje. “La estabilidad es muy importante para nosotros”, prosigue Jack. “Nos lleva de 4 a 5 días trabajar en todo el frente y no queremos que el ensilaje se caliente ya que es puro desperdicio energético e incrementa nuestros costos. Este año estuvimos preocupados, ya que tuvimos un septiembre húmedo y hubo señales de Fusarium, lo cual podría ocasionar el calentamiento del silo de trinchera”. Recientemente, Steve Symons de Lallemand Animal Nutrition hizo unas fotografías infrarrojas del silo que no muestran signos de calentamiento en la superficie. “MAGNIVA mantiene el silo muy fresco, lo que garantiza que más energía llegue a las vacas. Las lecturas de temperatura que tomamos muestran que la temperatura 20 centímetros detrás del frente también fue consistente, una evidencia firme de una excelente estabilidad aeróbica”.Joe Carter
Productor de ganado lechero
«Considero que uno obtiene de las vacas lo que uno les da y casi siempre el desempeño se relaciona con la calidad del forraje.«